Para orar cada día

6ª Semana del Tiempo de Pascua
Miércoles 8 de mayo de 2024. Festividad de Nuestra Señora de Luján
Comentarios preparados por el sacerdote diocesano Jacinto Pedrosa Deán

«Mucho tengo todavía que deciros»

Juan 16, 12-15

En aquel tiempo, Jesús habló así a sus discípulos: «Mucho tengo todavía que deciros, pero ahora no podéis con ello. Cuando venga Él, el Espíritu de la verdad, os guiará hasta la verdad completa; pues no hablará por su cuenta, sino que hablará lo que oiga, y os anunciará lo que ha de venir. Él me dará gloria, porque recibirá de lo mío y os lo anunciará a vosotros. Todo lo que tiene el Padre es mío. Por eso he dicho: Recibirá de lo mío y os lo anunciará a vosotros».


Comentario

Os invito a reflexionar hoy sobre la acción que realiza el Espíritu Santo al guiar a la Iglesia y a cada uno de nosotros a la Verdad. Es el mismo Jesús quien dice a los discípulos: el Espíritu «os guiará hasta la verdad».

La cultura actual es escéptica frente a la verdad; se considera que no existe nada definitivo y se piensa que la verdad deriva de lo que nosotros queremos. Son muchos los que no logran ver en Jesús el rostro de la verdad, que es el rostro de Dios. Jesús vino en medio de nosotros para que la conociéramos. La verdad no es una cosa, la verdad se encuentra. No es una posesión, es un encuentro con una Persona. Es el Espíritu Santo, el don de Cristo Resucitado, quien nos hace reconocer la Verdad. El Espíritu Santo nos lo enseñará todo. Es el «Paráclito», el que viene a ayudarnos.

El Espíritu Santo, como promete Jesús, nos guía «hasta la verdad plena» (Jn 16, 13); nos guía al encuentro con Jesús, plenitud de la Verdad. Y esto no lo podemos alcanzar con nuestras fuerzas. Si Dios no nos ilumina interiormente, nuestro ser cristiano será superficial.


Para reflexionar

Preguntémonos: ¿estoy abierto a la acción del Espíritu Santo, le pido que me dé luz, me haga más sensible a las cosas de Dios? Y también, ¿nuestra vida está verdaderamente animada por Dios? ¿Cuántas cosas antepongo a Dios? Necesitamos dejarnos inundar por la luz del Espíritu Santo, para que él nos introduzca en la Verdad de Dios, que es el único Señor de nuestra vida.


Oración

«Espíritu Santo haz que mi corazón se abra a la Palabra de Dios, que mi corazón se abra al bien, que mi corazón se abra a la belleza de Dios todos los días». ¿Cuántos de vosotros rezan todos los días al Espíritu Santo? Serán pocos, pero nosotros debemos satisfacer este deseo de Jesús y rezar todos los días al Espíritu Santo, para que nos abra el corazón hacia Jesús. Invoquemos todos los días al Espíritu Santo, así el Espíritu Santo nos acercará a Jesucristo.